Viajar en tren desde el aeropuerto de Schiphol a cualquier ciudad de Holanda

Si estás por viajar a Holanda en avión, entonces seguramente arribes en el aeropuerto de Schiphol. De allí luego querrás ir a Amsterdam o a alguna de las principales ciudades de los Países Bajos. En este artículo te contaré cómo viajar en tren desde el aeropuerto de Schiphol hacia cualquiera de estas ciudades.

Te explicaré cómo obtener los tickets de tren en el aeropuerto y además te voy a dar algunos consejos para desplazarte en este medio de transporte.

Llegada a Schiphol y salida al hall del aeropuerto

En mi caso, te contaré sobre la entrada desde mi punto de vista. Es decir, viajando desde Buenos Aires.

Al bajar del avión tendrás que ir siguiendo las indicaciones hacia la entrega del equipaje, aunque antes deberás pasar por migraciones. Ya te contaré a fondo sobre el proceso de migraciones al entrar a Europa.

Pasado migraciones, tendrás que retirar tu equipaje de la cinta transportadora. Una vez con el equipaje ya listo, hay que pasar un último control de aduana que es aleatorio. A algunos los controlan y a otros no. El control consiste en pasar las valijas por un escáner.

Una vez que se pasa por allí, se sale directo al hall del aeropuerto donde están todas las personas esperando a quienes llegan. Es en ese hall donde se pueden conseguir los boletos para viajar en tren.

Lo más conveniente es sacar los boletos en las máquinas expendedoras, donde no hace falta interactuar con nadie. Siguiendo los pasos que te contaré a continuación, en menos de dos minutos tendrás tu boleto en la mano.

Identificando las máquinas expendedoras de boletos

La gran ventaja que tiene el aeropuerto de Schiphol es que los trenes pasan por debajo. Esto hace que ir y venir del aeropuerto sea super sencillo. Para viajar en tren es necesario comprar unos boletos que se pueden adquirir a través de máquinas en el mismo hall del aeropuerto.

No hay demasiadas máquinas pero son fáciles de identificar. Son amarillas y azules y dicen «Train tickets».

Es probable que cuando llegues veas que están todas ocupadas. Por lo que pude ver, no se hacen colas ordenadas detrás de cada una, sino que la gente se queda cerca esperando que alguna se desocupe. Si ves que están todas ocupadas, te recomiendo que te quedes cerca de una en particular así cuando esa se desocupa te quede a vos.

Cómo obtener el boleto de la máquina

Este tipo de máquinas sirven exclusivamente para comprar boletos de tren y nada más que eso. Así que no son demasiado complicadas. Podés elegir entre distintos idiomas. En mi caso usé inglés y no recuerdo si estaba la opción de español.

En cuanto al costo, yo compré un boleto a La Haya y me salió € 9,90.

Las máquinas tienen una pantalla táctil con indicaciones fáciles de seguir. Al costado de la derecha, tienen una ranura para insertar tarjeta de crédito y también un lugar para depositar monedas.

Primero deberás seleccionar qué tipo de boleto querés, teniendo en cuenta las siguientes opciones:

• Cantidad de viajes: Boleto de ida o de ida y vuelta
• Validez del boleto: se puede sacar boleto para el mismo día (opción por defecto) o se puede sacar boleto para otro día en particular.
• Estación destino: desde Schiphol se puede viajar a Amsterdam, Rotterdam y La Haya, entre otras ciudades.
• Clase: los trenes en Holanda tienen primera y segunda clase. La diferencia entre clases es leve. Son prácticamente iguales, aunque en primera se puede viajar con un poco más de espacio. Obviamente los boletos de primera son más caros. Así que te recomiendo que saques de segunda.

Una vez que selecciones esto en la pantalla, confirmarás y deberás seleccionar qué forma de pago utilizar. En mi caso, como pagué con tarjeta de crédito, la siguiente indicación que da la misma máquina es que hay que seguir las indicaciones del panel de la derecha.

Allí, donde se pone la tarjeta de crédito hay también una pequeña pantalla LCD donde te indicarán que ingreses tu tarjeta en la ranura. Hay que tener en cuenta que la tarjeta entra completa y que es necesario que tenga chip. Si tu tarjeta no tiene chip, entonces no va a poder ser leída por la máquina.

Una vez introducida la tarjeta, el sistema te indicará que ingreses el PIN, que es la clave asociada a tu tarjeta. Debajo de la ranura hay un panel numérico para realizar esta operación.

A continuación, con el pago efectuado, tendrás que retirar la tarjeta y el boleto se imprimirá. Debajo de la pantalla hay una abertura donde se depositan el boleto generado. Este consiste en una tarjeta de papel tipo cartulina, aunque por dentro tiene un chip o algún tipo de tecnología magnética.

Finalmente, la máquina te ofrece imprimir el ticket de compra, pero esto es opcional. Resta elegir la opción «Próximo cliente» para cerrar tu sesión con la máquina, aunque de todos modos no hay ningún tipo de riesgo en caso de que te olvides de hacerlo.

Con el boleto ya en la mano, es el momento de ver dónde y cómo subirse al tren.

Cómo saber qué tren tomarse

Los trenes en Schiphol pasan por debajo así que sí o sí tendrás que bajar unas escaleras para tomarlos.

Ubicar tren y andén por el que pasa

Antes de bajar a los andenes, tenés que chequear por cuál de ellos pasa el tren que te lleva a la ciudad que estás viajando. Para ello, es necesario que busques las pantallas donde se indica. Estas pantallas están también en el mismo hall, y pueden o no estar cerca de las máquinas, aunque sí suelen estar cerca de las escaleras de bajada a los andenes.

En estas pantallas se muestran por horario los distintos trenes que van pasando por Schiphol. Dicen el destino, tipo de servicio, el horario y el andén. Las pantallas muestran la información actualizada, minuto a minuto, así que te recomiendo que leas con detenimiento lo que informan.

En cuanto al tipo de servicio, este suele ser sprinter o intercity (IC). El sprinter es un servicio más lento que conecta todas las paradas entre dos ciudades grandes. El intercity en cambio, conecta paradas importantes únicamente y por eso es más rápido. El costo es el mismo así que te recomiendo siempre que te muevas con intercity, salvo que quieras visitar algunas de esas paradas menores.

Los andenes están señalizados con números. Si ves que hay un número con una letra, por ejemplo 5b, es porque el anden es grande y lo separan en dos partes, a y b. Pero en sí, se trata del mismo andén.

Luego, verás que hay distintas escaleras para bajar desde el hall central a los andenes. Cada escalera te lleva a dos andenes. Por ejemplo, el 5 y el 6, ó el 7 y el 8. Si bajás en el andén equivocado no hay problema porque podés volver a subir.

Check-in y llegada del tren

Una vez que sepas cuál es el andén por el que pasa el tren tenés que hacer check-in con tu tarjeta. Esto lo hacés en unos postes que están arriba, en el hall central. Te vas a dar cuenta cuáles son porque vas a ver a los holandeses acercarse a ellos y acercar sus tarjeta allí.

Basta con acercar tu boleto a los lectores de los postes. Verás que tienen una pantalla LCD y que cuando la tarjeta se aproxima, este se activa y te devuelve un mensaje en holandés.

Hecho el check-in, hay que bajar al andén. Allí tendrás que volver a ver las pantallas que están en cada andén. Es importante que tengas en cuenta que en esas pantallas siempre se anuncia el siguiente tren. Así que si ves que no figura el tren que viste anunciado en el hall del aeropuerto, puede ser porque todavía hay otros trenes que pasan antes.

Por último cuando el tren llega, en la parte de adelante verás que tiene una pantalla LCD que informa el destino final.

Viajando en un tren holandés

El servicio de trenes acostumbra ser muy puntual. El tren llega a la estación y se suele detener uno o dos minutos antes de volver a arrancar, así que si lo estás esperando desde hace rato, no es necesario que corras a subirte.

Como te contaba, los vagones se dividen en secciones de primera y segunda clase. Es fácil identificarlos porque en la parte de afuera del vagón tienen los números 1 ó 2. Por dentro, no notarás demasiada diferencia entre las dos clases. También hay vagones silenciosos en los que no se puede hablar ni hacer ruido. Hasta el momento no me subí a ninguno, aunque tengo entendido que no son tan estrictos.

Algunos trenes tienen dos pisos y otros solamente uno. Adentro encontrarás lugar para poner tus valijas, por encima de los asientos. También te recomiendo que uses el lugar debajo del asiento para acomodar tus pertenencias ahí.

En ningún momento descuides tus cosas. Si bien en Holanda se está más seguro que en otras partes del mundo, no hay que confiarse.

A medida que el tren avance, verás las indicaciones en una pantalla dentro del mismo vagón. También escucharás anuncios por altoparlantes, aunque difícilmente los puedas entender porque estarán siempre en neerlandés.

Guardas y multas

Ocasionalmente puede que pase un guarda a chequear los boletos. En ese caso, verás que todo el mundo le entrega la tarjeta de transporte o el boleto. El guarda utilizará un lector para ver si cada pasajero hizo check-in correctamente. En tu caso, tendrás que entregarle tu boleto, por eso te recomiendo que lo tengas a mano. Luego de chequearlo, te lo devolverá.

En caso de no haber hecho check-in o en caso de estar viajando en primera luego de haber sacado boleto para segunda, se te puede aplicar una multa que puede ser bastante costosa. Así que es mejor estar atento a todos los detalles que menciono aquí para evitarlo.

El final del viaje

Cuando el tren llegue finalmente a la estación, hay que bajar y salir del andén para llegar al hall de la estación. Antes de llegar, te vas a encontrar con la puertas de acceso al andén. Allí deberás acercar nuevamente el boleto a los lectores para realizar el check-out.

Al igual que cuando se hace check-in, si de entrada no identificás donde están esos lectores, entonces esperá a ver qué hace la gente alrededor. Seguramente veas que acercan sus tarjetas de transporte a unos lectores. Esos son los dispositivos donde hay que hacer check-out.

Si sacaste boleto de ida y vuelta, todavía te queda un viaje más así que tenés que conservar el boleto. Si no, ya lo podés tirar.

Resumiendo

En este artículo te he contado cómo viajar en tren desde el aeropuerto de Schipol hasta cualquier ciudad importante de los Países Bajos. Lo más importante a tener en cuenta es que:

• Es conveniente sacar los boletos en las máquinas siguiendo las instrucciones que allí se presentan y pagando con tarjeta de crédito.
• Hay que prestar atención a las pantallas para saber qué tren tomar.
• Luego hay que hacer check-in y bajar al andén que corresponde
• Esperar el tren en el andén prestando atención a las pantallas que siempre indican el siguiente tren.
• Subir al tren teniendo en cuenta que hay secciones de primera y otras de segunda.
• Hacer check-out al finalizar el trayecto.

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Espero que este artículo haya sido de tu interés. Si te interesa vivir en Holanda, te recomiendo el artículo Cómo es vivir en La Haya, ciudad en la que estuve durante cuatro años.

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Eso es todo. Muchas gracias por tomarte el tiempo de leerme.

Hasta la próxima.