En este artículo te voy a contar sobre mi visita al Museo Van Gogh de Amsterdam, en los Países Bajos. Este museo reúne una buena parte de la obra del artista neerlandés, considerado por muchos como uno de los grandes pintores de todos los tiempos.
Aquí te contaré dónde está ubicado el museo y cómo llegar desde la estación central de trenes de Amsterdam. También voy a describirte el museo por dentro. Finalmente haré un rápido repaso por las obras destacadas de Vincent Van Gogh que se encuentran en este museo, y de aquellas obras del autor que brillan por su ausencia, debido a que se encuentran en otros museos del mundo.
Contenido
- 1 Van Gogh y yo
- 2 Dónde se encuentra el Museo Van Gogh y cómo llegar
- 3 Tickets e ingreso al museo
- 4 Estructura del museo
- 5 No se pueden sacar fotos
- 6 Objetos vinculados a Van Gogh
- 7 Guías multimedia
- 8 Obras de artistas relacionados
- 9 Las obras destacadas del museo
- 10 Otras obras destacas
- 11 Las obras que no están en el Museo Van Gogh
- 12 La cafetería del museo
- 13 Las tiendas de regalos
- 14 Concluyendo
Van Gogh y yo
Sin ser demasiado versado en arte, conocía algo de la vida y la obra de Vincent Van Gogh. Bueno, por algo es uno de los mejores pintores de la historia. Pero más allá de sus cuadros más famosos como La Noche Estrellada o Los Girasoles, mucho no sabía sobre su obra.
Por un motivo o por otro, la obra de Van Gogh nunca me llegó. Y después de haber recorrido el museo e investigado más sobre su vida y su obra… bueno, tampoco. Me parece más interesante su biografía que su obra en sí misma. Al menos por ahora. Quizás en el futuro me despierte más interés.
Entiendo que esto tiene mucho que ver con cómo nos tomamos el arte en general, incluyendo la música y la literatura. Hay artistas que nos deslumbran y nos fascinan, pero hay otros que no nos llegan.
Un mes antes de pisar el Museo Van Gogh, visité el Museo Magritte en Bruselas. Conocía muy poco de la obra del artista belga, pero al día de hoy sigo interesado en sus cuadros crípticos. De eso te cuento en el artículo Visita al Museo Magritte de Bruselas.
En pocas palabras, lo que me ocurrió con Magritte, no me sucedió con Van Gogh.
Pero más allá de lo que me pareciera la obra de Van Gogh, visitar su museo era un punto ineludible de mi estadía en Holanda. Así que fui desde La Haya, lugar donde vivo cuando me encuentro allá, con rumbo a Amsterdam a conocer uno de los museos más importantes del país.
Dónde se encuentra el Museo Van Gogh y cómo llegar
El Museo Van Gogh se encuentra en un área de Amsterdam donde hay muchos museos. La dirección es Museumplein 6 y está a unos 2,6 km. de la Estación Central de Amsterdam.
La forma más fácil de llegar es a través de un tram. Tanto el 2 como el 12 te dejan muy cerca, teniendo que caminar apenas una o dos cuadras luego de bajarse. En mi caso, me subí al 12 y en 20 minutos estaba llegando a la parada Van Baerlestraat. Para viajar se pueden sacar boletos arriba del mismo tram o usar una OV Chipkaart que es la SUBE holandesa.
Habiendo vivido casi toda mi vida en Barracas, jamás hubiera creído que le iba a poder contar a un amigo que «me tomé el 12 y me bajé en el Museo Van Gogh».
En esa área se encuentra también el museo más grande de los Países Bajos, el Rijkmuseum. Sobre este lugar te cuento en el artículo: 9 destacados del Rijksmuseum de Amsterdam para no perderse.
Tickets e ingreso al museo
Lo mejor es comprar los tickets online con anticipación. El precio actualmente es de 19 € para adultos. Sube a 24 € si se quiere incluir una visita guiada multimedia, es decir, unos auriculares con información sobre cada obra. Lo recomiendo mucho. Lo mejor: menores de 17 años ingresan gratis al museo.
Los horarios de apertura varían según la época del año así que es recomendable verificarlos en horarios de apertura en la web oficial. Desde el museo aseguran que la visita promedio es de 1 hora y 15 minutos de duración. Yo creo que puede durar más, especialmente si te tomás un café o incluso almorzás en el lugar.
Para más información, te sugiero que leas atentamente la página con la información general sobre el museo: planifica tu visita. Allí también podrás descargar un plano del lugar.
El ingreso al edificio es bastante simple. Con las entradas ya encima hay que colocarse en una fila que avanza rápido. No hace falta llevar impresos los tickets. La mayoría de la gente los presenta con su código QR en el smartphone y el personal que te recibe lo escanea directamente de allí.
Estructura del museo
El edificio donde se encuentra el Museo Van Gogh se divide en dos. Por un lado, el edificio principal y por el otro, el ala de exposiciones. El edificio principal tiene 4 niveles y es allí donde está toda la obra que nos interesa.
En el Nivel 0, se encuentra el acceso, los servicios como los baños, lockers, compra de guías de audio y la cafetería. Allí también comienza la exposición con la cronología de la vida del artista y algunos de los muchos autorretratos que pintó.
En el Nivel 1 hay diferentes salas asociadas a etapas y estilos de Van Gogh. Se presentan obras agrupadas por temáticas incluyendo los modelos que usaba el artista, su búsqueda de pintar la vida cotidiana de los campesinos, su periodo floreciente y su relación y admiración por el arte japonés, entre otros.
En el Nivel 2 hay información y objetos vinculados a la vida de Van Gogh. Se encuentran allí cartas manuscritas del propio artista, junto con elementos que le pertenecieron a él y a su familia. Se cuenta también la historia de cómo su obra fue preservada gracias a la esposa de su hermano.
Me pareció que la exposición en el Nivel 3 era rotativa. Cuando visité el museo, había una muestra de serigrafías que no me quedó claro si tenían o no algún vínculo con Van Gogh.
En diferentes puntos del museo hay tiendas de regalos. Hay también una amplia cafetería llamada Le Tambourin.
Hay algunas actividades extra para que los más pequeños (sólo de 6 a 12 años) jueguen. Son gratuitas y consisten en tareas que tienen que hacer al recorrer el museo. Hay una que se llama el Juego de las Pistas y está disponible en español. En caso de que completen todas las tareas se puede obtener una sorpresa en el Centro de Información. Me gustaría saber cuál es esa sorpresa.
No se pueden sacar fotos
Me gustaría ilustrar todo esto que estoy contando y lo que viene a través de fotografías, como lo hice en artículos anteriores. Sin embargo, en el Museo Van Gogh no está permitido tomar fotografías. Sólo se pueden sacar fotos en un par de murales con fondos de Van Gogh, en áreas concretas del museo.
¿El motivo? Según se expresa el propio museo, las fotografías molestan en las salas donde se encuentran las obras.
A mí esa explicación no me convence. En todo caso, lo que debería molestar es el flash, pero no una foto en sí misma.
Lo cierto es que a pesar de que no se pueden sacar todos, todo el mundo las saca. Ah, pero no las quieras sacar vos porque se te va a acercar un señor de seguridad a decirte muy amablemente: «Sir, no pictures, please».
Y hablando del tema de la seguridad, en este museo me pareció que la exigencia en cuanto a cumplimiento de las reglas es bastante alta. Presencié dos o tres episodios donde el personal de seguridad «retaba» a la gente por acercarse mucho a algunos cuadros o incluso por tocarlos. Ahora que lo pienso, en ese último caso, corresponde.
Más allá del impedimento, saqué una o dos fotos, pensando únicamente en poder mostrar algo del museo aquí. Y un poquito también de bronca, por ver que todo el mundo sacaba fotos impunemente sin que nadie les dijera nada.
Objetos vinculados a Van Gogh
Además del trabajo de Van Gogh, el museo tiene algunos elementos que le pertenecieron a él. Entre ellos, destacan algunas paletas y pinceles, que se exhiben en vitrinas.
Personalmente, estos elementos me llaman mucho la atención. Pensar que Van Gogh los sostuvo en sus manos y los usó para realizar sus creaciones me parece algo muy poderoso.
Como mencioné antes, hay también cartas escritas por el artista neerlandés, muebles de su casa y otros elementos.
Guías multimedia
Las guías multimedia del Museo Van Gogh consisten en pequeños dispositivos con pantallas y una moderna app que sirve como selector de obra. Vienen con auriculares y están disponible en idioma español. Son excelentes y te recomiendo que los adquieras. Hacen que la experiencia en el museo sea mucho más didáctica.
Basta con identificar el número de obra y darle play para escuchar la historia que hay detrás de esa pintura.
Obras de artistas relacionados
Además de las obras de Van Gogh, hay algunas pinturas de artistas que compartieron sus días con él. Seguramente el más destacado de todos sea Paul Gauguin.
De los otros artistas, me sorprendió encontrar una obra de Odilon Redon, un pintor francés postimpresionista, identificado con el simbolismo y precursor del surrealismo. Había visto otras obras de este autor en otros museos y me parecieron intrigantes. La pintura de Redon en el Museo Van Gogh se llama Ojos cerrados y es de 1889.
Las obras destacadas del museo
¿Cuáles son las obras más destacadas que se encuentran en este museo? A continuación voy a señalar las que están consideradas como las más importantes, siempre dentro de la colección que posee el Museo Van Gogh.
Los Girasoles, de 1888
La primera que destaca son Los Girasoles, de 1888. En realidad, este es uno de diversos cuadros similares que pintó Van Gogh sobre girasoles.
Me sorprendieron las dimensiones de este cuadro perteneciente al movimiento postimpresionista, 93 cm. x 72 cm. Quizás no te parezca importante, pero para mí es algo a tener en cuenta. Sin ir muy lejos la famosa Gioconda, o incluso La Lechera de Johannes Vermeer, son cuadros muy chicos que no se pueden apreciar y cuando uno los ve, se decepciona un poco. No me pasó con Los Girasoles de Van Gogh.
Como decía Mr. Bean en su película de 1997, al ser cuadros grandes, se pueden ver mejor. En cambio, si fueran pequeños… ¡microscópicos!, nadie podría apreciarlos.
Almendro en Flor, de 1890
Otro gran destacado es el Almendro en Flor, un óleo sobre lienzo de 1890, que tiene influencias de la xilografía japonesa. Fue un regalo de Van Gogh para su hermano Theo y su esposa, luego de convertirse en padres de Vincent William, el sobrino del pintor. La relación entre los hermanos era muy estrecha y Theo honró a Vincent bautizando a su hijo con su nombre.
El dormitorio en Arlés, de 1888
Recuerdo una vez que un profesor abrió una clase en la facultad con una imagen de un cuadro. Preguntó si alguien sabía quién era el autor. Yo no lo sabía y me dolió no poder dar la respuesta porque en materia de cultura general no me gusta perder. Al que levantó la mano y respondió no lo oí, pero el «Muy bien. Van Gogh» del profesor lo escuché claramente y me dio bronca.
No recuerdo cuál era el punto de arrancar la clase con un cuadro de Van Gogh, pero nunca me voy a olvidar que era El dormitorio en Arlés, de 1888. Un óleo sobre lienzo donde el artista neerlandés pintó la habitación donde se hospedó durante su estancia en Arlés, Francia.
Autorretrato como pintor, de 1887-1888
En el Nivel 0 del museo hay varios autorretratos de Van Gogh. Si bien pintó muchos y el museo posee unos cuantos, de todos los que están allí el que más se destaca es Autorretrato como pintor, donde se pinta así mismo pintando. Una especie de obra artística recursiva.
En este cuadro se percibe ese estilo tan particular, con pinceladas gruesas y colores vibrantes. Es un óleo sobre tela que data de principios de 1888.
Un par de zapatos, de 1886
Un par de zapatos, de 1886, es otro cuadro muy famoso que rompe un poco con la temática habitual de lo que se ve en el Museo Van Gogh. Un cuadro simple pero que ha dado lugar a una serie de interpretaciones filosóficas.
El mencionado anteriormente René Magritte se inspiró en este mismo cuadro para hacer una de sus creaciones surrealistas en la obra Le modèle rouge, de 1935.
La casa amarilla, 1888
Otro cuadro de 1888 pintado en óleo sobre lienzo. El artista retrata la amplia casa que alquiló en Arlés en septiembre de ese año. Pensaba en vivir allí y compartirla con su hermano Theo y otros artistas. Entre ellos, Paul Gauguin quien se instalaría en octubre.
Al año siguiente, Van Gogh se vería envuelto en una fuerte discusión con Gauguin e intentaría atacarlo con una navaja de afeitar. Luego de arrepentirse de sus acciones, la culpa pesaría sobre el artista neerlandés haciendo que se autoflagelara cortándose un pedazo de su oreja.
O al menos esa es la versión más difundida. Algunos se arriesgan a decir que fue Gauguin quien le cortó la oreja a Van Gogh en una pelea.
El dato curioso es que todos los edificios de este cuadro fueron destruidos en 1944 por una bomba en un ataque aéreo.
Otras obras destacas
Entre otras obras destacadas se encuentran Los comderos de patatas (1885) y Trigal con cuervos (1890)
Las obras que no están en el Museo Van Gogh
Al ser un pintor tan célebre, quizás el más famoso de la historia, los cuadros de Van Gogh se encuentran por todos lados del mundo.
Recuerdo que una vez asistí a una muestra en el Museo de Bellas Artes de Buenos Aires. Al terminarla, tenía ganas de recorrer un poco el museo, pero ya era la hora de cierre, así que me dirigí hacia la salida junto a toda la gente que salía del lugar.
En uno de las salas se hizo una congestión de personas y quedé atrapado entre tres personas y una pared. Esa pared, que estaba a pocos centímetros, tenía un cuadro colgado. Miré de reojo y pensé «Ah, qué lindos colores». Luego miré el cartelito del costado con la información y se leía claramente «Van Gogh». Sí, estaba frente a un Van Gogh en Buenos Aires.
Lo que quiero decir con esto es que los cuadros de Van Gogh están por todos lados y es imposible reunirlos todos en un sólo lugar. Y esto incluye también a sus grandes obras.
A continuación voy a repasar cuáles son los cuadros más famosos del artista neerlandés que no están en el Museo Van Gogh. No voy a poner las fotos para no confundir a los que scrolleen la página rápido.
La Noche Estrellada (1889) es quizás el más famoso de Van Gogh. Se encuentra en el MoMA, de New York.
El llamado Autorretrato a secas que también es de 1889, y La Noche Estrellada sobre el Ródano (1888) están en el Musée d’Orsay, de París.
Terraza de café por la noche (1888) se encuentra en el Museo Kröller-Müller de Otterlo, un pueblo de los Países Bajos.
El café de noche (1888) está en la Galería de Arte de la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut.
El famoso Autorretrato con la oreja vendada (1889) se encuentra en la Courtauld Gallery de Londres.
La cafetería del museo
La cafetería del museo me pareció un poco decepcionante. No había demasiada variedad de comida y bebidas para elegir, y además, como no podía ser de otra manera estaba todo muy caro. Como ya era tarde, almorcé allí algo raro que no tengo muy claro que era pero que estaba mejor de lo esperado.
Si estás planeando ir al Museo Van Gogh, te recomiendo que busques otro lugar para almorzar.
Las tiendas de regalos
Conté al menos tres tiendas de regalos en el Museo Van Gogh. Todas están en diferentes niveles. Como todas las tiendas de museos de arte, se centran en una temática o en un artista, pero incluyen otros temas vinculados al arte.
Las tiendas de este museo son tan adictivas como las de cualquier otro museo, o quizás incluso más. Muchos de los objetos que vas a ver se basan generalmente en dos cuadros, Almendro en flor y Los girasoles. Es por eso que verás patrones floreados celestes y amarillos para bolsos, mochilas, carteras, protectores para lentes, y cualquier cosa que te imagines.
De una de estas tiendas me llevé el libro Impresionismo, de Ingo F. Walther. Una obra de 784 páginas donde se repasa la historia del impresionismo desde sus comienzos.
Concluyendo
El Museo Van Gogh es uno de los museos más importantes de Amsterdam. En cuestión de horas verás muchas de las más importantes obras del pintor neerlandés y te acercarás a su historia.
Te apasione más o menos la obra de Van Gogh, visitar este museo es un viaje didáctico y cultural, que si tenés la posibilidad, te recomiendo que hagas.