Todo el mundo debería tener un blog. Es más, creo que a la edad de 18 años (por poner una edad) todo ser humano debería comenzar a escribir algún tipo de bitácora personal.
Escribir es una excelente manera de ordenar ideas en la cabeza. Es una herramienta que permite aprender a expresarse mejor. Ayuda a volcar sentimientos que tenés guardados adentro. A mí, por ejemplo, se me hace más fácil escribir lo que siento que decirlo.
Para escribir sólo hay que tener algo que decir -Camilo José Cela
Si creés que sólo puede escribir quien lo hace bien, te equivocás. Lo cierto es que puede escribir quien se anime a hacerlo. Para poder escribir bien hay que leer mucho y escribir mucho.
Sinceramente, yo no me preocupé nunca por eso. A tal punto, que no tengo claro qué es escribir bien y no tengo idea si yo lo hago. Tampoco me importa.
Escribir es un oficio que se aprende escribiendo -Simone de Beauvoir
A veces le comento a las personas mi idea de que todos deberían escribir un blog o tener un espacio personal donde escribir. La gran mayoría me responde que no saben sobre qué podrían llegar a escribir. Como si para poder desarrollar una idea hubiera que ser un experto en ella. Nada más lejos que eso.
Los temas a tratar en ese espacio pueden ser tan variados como lo consideres. Si no sabés sobre qué podés escribir, acá te ofrezco una lista de 8 tipos entradas de las cuales podés servirte:
Contenido
Anécdotas personales
Todas aquellas historias que les contás a tus amigos y que pueden ser graciosas, emocionantes, indignantes, etc.
Ficción
Si tus anécdotas no son lo suficientemente interesantes o si preferís cultivar un perfil bajo respecto de tu vida, entonces animate a crear tus propias historias y compartilas con todos. Inventá mundos imaginarios con personajes que tengan las características que quieras.
Poesía
Una buena forma de expresar emociones y sentimientos profundos puede ser la poesía. Aquí sí puedo aceptar que escribir en versos es más difícil. Pero si lo intentás estoy seguro que con el tiempo solo podés mejorar.
Opinión y crítica
Aportá tu punto de vista respecto de algún tema en particular. Algo que te gustó, algo que no. Política, deporte, economía, ciencia, arte, etc. Todo el campo del saber humano está disponible para que opines y critiques.
Reseñas
Escribir reseñas, a diferencia de las críticas y las opiniones es que son neutrales (o lo más neutrales posibles). Podés escribir reseñas de libros, discos, conciertos, películas, obras de teatro, etc.
Consejos
Quizás no te especialices en ningún campo, pero sí tengas cierta experiencia en algo en particular. Esto significa que estás en condiciones de dar algunos consejos a otras personas. Hacelo de forma clara y si podés convertí cada consejo en una en lista. Eso hace que atraiga a más personas.
Enseñanza
Explicar algo es de gran ayuda para la comunidad. Cuando enseñás, todos tus lectores se convierten en alumnos. Pero no solo eso, explicar algo es una buena manera de entender mejor lo que se explica. No hace falta dar cátedra sobre astrofísica, podés contar cómo hacer ese pastel de papa que te sale tan bien.
Investigación
Si te gusta recabar información, ordenarla, pensar hipótesis y comprobar algo, podés hacerlo. La investigación periodística es quizás la más interesante a la hora de publicar en un medio como a los que me estoy refiriendo ya que la científica está acotada a otro medio en particular.
A empezar a escribir
Y estos no son todos los tipos de artículos que podés comenzar ya mismo. Estoy seguro que si pensás un poco, se te pueden ocurrir otros.
Acordate que no tenés que atarte a uno de estos tipos. Podés dar consejos, enseñar, escribir cuentos, opinar y criticar, en distintos artículos o incluso, en uno solo (si te das la suficiente maña para lograrlo).
Ahora ya no tenés excusas. ¿Qué estás esperando para comenzar a escribir? ¿No sabes cómo empezar? Te dejo un consejo de alguien que de esto sabe mucho.
Cuando me preguntan: ¿Cómo escribir? Siempre respondo: una palabra a la vez. -Stephen King
Gracias por leerme.
¡Hasta la próxima!