Eindhoven es la quinta ciudad más poblada de los Países Bajos. Se destaca por ser la cuna de la empresa Philips y también por su equipo de fútbol, el PSV Eindhoven.
Esta no es para nada una ciudad turística, pero al estar viviendo en Holanda y al haber recorrido ya varios puntos destacados, me quedé un fin de semana en Eindhoven junto a mi esposa.
En este post, te voy a contar cómo es la ciudad y qué podés hacer allí.
Contenido
Dónde queda Eindhoven y cómo llegar
Eindhoven está en el sur de los Países Bajos, en la provincia de Noord Bravante. Es sin dudas la ciudad más importante y más poblada de la provincia, por sobre Breda, Tilburg y la capital, ‘s-Hertogenbosch, de la cual te conté en el post Tras los pasos de El Bosco en Den Bosch.
Eindhoven tiene más de 220.000 habitantes y es la quinta ciudad más poblada de los Países Bajos detrás de Amsterdam, Rotterdam, La Haya y Utrecht. También Eindhoven es uno de los polos tecnológicos del país, en gran medida gracias a la histórica presencia de Philips en la ciudad.
Llegar a Eindhoven es muy fácil. Basta con tomarse un tren desde cualquiera de las ciudades principales. En mi caso, desde La Haya, en un viaje que dura aproximadamente una hora y media.
Fisonomía de la ciudad
Al llegar, la estación de Eindhoven es igual a cualquier otra estación holandesa: prolija, limpia y ordenada. Saliendo de allí prácticamente se llega al centro de la ciudad. A unos metros está el histórico edificio de Philips y un poco más adelante, el estadio del PSV.
Los destacados de la ciudad están en un área de no más de 6 cuadras de radio. De hecho, durante nuestra visita, en ningún momento abandonamos ese sector.
El clima en Eindhoven me pareció más frío que en La Haya y me sorprendió el viento. Quizás por la presencia del río Dommel, o tal vez por cualquier otro fenómeno metereológico o geográfico que desconozco.
Las calles de Eindhoven se parecen a las de la mayoría de las ciudades de Holanda. A pesar de estar en el sur y tener mayor influencia católica, no vi imágenes religiosas en las calles, como si lo vi en Maastricht, que se encuentra mucho más al sur. Si te interesa saber cómo es esta otra ciudad, podés leer mi artículo: Maastricht, tres días en el sur de los Países Bajos.
En el corto tiempo que estuve no vi canales, aunque sí hay algunos puentes para cruzar el río. Los edificios son modernos, pero no tanto como los de Rotterdam. En este panorama se destacan algunas iglesias católicas, que se mezclan en el paisaje urbano.
Philips
La empresa Philips fue fundada en 1891 en Eindhoven por Gerard y Anton Philips, hermanos e hijos del empresario Frederik Philips.
La familia Philips fue pionera en el negocio de la tecnología, pero también en otros aspectos vinculados a lo social. Daban beneficios a sus empleados y tenían un compromiso con la ciudad de Eindhoven. Eso explica el nivel de vinculación que tiene la empresa con la gente de allí.
A esto se le suma la longevidad de la empresa y su omnipresencia. Seguramente todos en Eindhoven han tenido algún familiar o conocido que trabajó en Philips, o a tal vez han tenido un negocio que tenía a la compañía como cliente, o al menos, son hinchas del PSV.
La compañía comenzó fabricando lamparitas en la nueva era de la iluminación que comenzó a finales del siglo XIX. Con el tiempo, fue creciendo y pasó a fabricar radios, televisores y todo tipo de electrodomésticos para el hogar desde cafeteras hasta afeitadoras.
Todos tenemos o hemos tenido algún producto fabricado por Philips en nuestras casas.
Actualmente la empresa cuenta con 80.000 empleados en todo el mundo y se ha decantado principalmente hacia la iluminación LED y a la fabricación de equipos de salud. Al mismo tiempo, sigue vendiendo su marca a otras empresas para otro tipo de productos que en realidad ya no fabrica.
El club PSV Eindhoven fundado en 1913 es también de la compañía y su estadio lleva el nombre de Philips Stadion. Está ubicado en el mismo centro de Eindhoven, cerca de la estación y de la antigua fábrica de Philips.
Eindhoven en la Segunda Guerra Mundial
Para 1940, se sabía que Philips era uno de los principales fabricantes de tubos de vacío que se utilizaban en la fabricación de radios. También se conocían los avances que la empresa estaba haciendo con respecto al desarrollo de radares.
La ciudad cayó en manos de los nazis y el 6 de diciembre de 1942 fue bombardeada por la RAF en la operación Oyster también conocido como el bombardeo de Sinterklaas (Sinterklaasbombardement). Sinterklaas es el Papá Noel holandés, y la noche en que más se lo espera es el 5 de diciembre.
El blanco de la Fuerza Aérea Británica fue la fábrica Philips. El bombardeo dejó 148 civiles muertos.
En septiembre de 1944 Eindhoven volvió a ser bombardeada, esta vez por la Luftwaffe alemana, en el marco de la operación aliada Market Garden, que buscaba ponerle fin a la guerra en Europa antes de la Navidad del 44′. En este nuevo bombardeo, murieron 227 civiles.
Con tanto bombardeo, Eindhoven fue reconstruida tras la Segunda Guerra Mundial y no quedó mucho de la ciudad antigua.
Qué hacer en Eindhoven
Eindhoven no es una ciudad turística. Sin embargo, hay algunos destacados para conocer y visitar.
Centro de Eindhoven
A pocos metros de la estación de trenes de Eindhoven se encuentra el centro. No es muy diferente de cualquier otro centro de ciudad holandesa, aunque sí es bastante más pequeño que el de las grandes ciudades. Allí vas a encontrar una peatonal con los principales negocios y un paseo de compras techado.
Cerca del edificio Philips vas a encontrar un edificio transparente con forma de burbuja. No tiene mucho de especial. En su interior alberga locales comerciales, pero le da un toque ultramoderno a la ciudad.
La oferta gastronómica no es demasiado amplia, pero hay restaurantes clásicos y varios de comida rápida.
Si estás por Eindhoven, no dejes de visitar el Markt, allí vas a encontrar bares y bolichitos para tomar algo. Yo visité este lugar en invierno, tras la distención de las reestricciones por la pandemia de covid-19 y los lugares estaban explotados de gente.
Philips Light Tower
La Philips Light Tower es un edificio que pertence a Philips y que tiene mucho de su historia. Actualmente tiene otras funciones completamente diferentes y está dividido en secciones.
Una de estas secciones del edificio funciona como hotel. Está conectado al edificio contiguo, que pertence a un Inntel Hotels y de alojarte allí, podés elegir una habitación en la Philips Light Tower.
¿Cómo son estas habitaciones? Al estar situadas en el antiguo edificio y taller de Philips, el diseño es industrial. Destacan las columnas de concreto, los techos altos y los ventanales típicos de fábrica.
Obviamente para potenciar todo esto, la ambientación es acorde. Por ejemplo, los números de las habitaciones son antiguas publicidades de Philips. Dentro de ellas, hay algunos elementos reciclados de la antigua fábrica, como por ejemplo las mesas de trabajo.
Por lo demás, es un hotel como cualquier otro. Tiene un restaurante moderno y algunos otros servicios adicionales.
Museo Philips
El Museo Philips se encuentra cerca del centro y de ir a Eindhoven, es un punto que vale la pena visitar. El recorrido se puede hacer en una hora y es bastante entretenido.
Allí se cuenta la histora de la empresa Philips desde sus orígenes en el siglo XIX. De esta forma, el museo hace un recorrido por el vertiginoso avance tecnológico que el ser humano ha experimentado durante el siglo XX.
Cuando visité este museo lo mejor fue encontrarme con Phily, un robot que tienen allí y con el que podés conversar. Phily habla en holandés y en inglés aunque se toma su tiempo para responderte.
A pesar de las limitaciones que este robot pueda tener, para mí, como fan de Isaac Asimov, fue un sueño hecho realidad interactuar al menos mínimamente con él.
Estadio del PSV
El PSV Eindhoven es el equipo de la ciudad y su estadio, el Philips Stadium, está también cerca del centro y a metros de la Philips Light Tower.
La verdad es que no hay demasiado para ver desde afuera, pero si te gusta el fútbol, podés pasar y sacarle algunas fotos a esta cancha, de uno de los equipos más importantes de los Países Bajos.
Van Abbemuseum
El Van Abbemuseum es un importante museo de arte moderno. Aquí vas a encontrar, pues… arte moderno, con todo lo que eso implica.
Este museo tiene un cuadro de Picasso que vas a ver en una de las primeras salas. Allí también hay exhibidas obras de la escultora argentina Alicia Penalba.
Personalmente no soy fan del arte moderno y el resto de lo que vi en el Van Abbemuseum no me gustó nada. Poco talento y demasiada política para mi gusto. Todas obras de «denuncia», carentes de creatividad y ni hablar de técnica.
Lo que más me llamó la atención fue la gran cantidad de espacio vacío que encontré en este museo. Como si le faltaran obras.
El chiste más grande fue acceder al piso superior a través de un ascensor, para ver cuatro cuadritos pintados con marcador.
Pero bueno, seguramente sea yo el que no entiende nada de arte.
Un dato interesante es que el museo está dividido en dos. Tiene un edificio moderno y otro antiguo, que están conectados. En el ala del museo viejo había una exhibición bastante grande del extinto artista argentino León Ferrari, famoso por trascender en los medios por sus polémicas, especialmente contra la Iglesia Católica.
No te recomiendo que visites este museo, salvo que te guste mucho el arte (todo tipo de arte).
Edificio con forma de plato volador
Estuve dos noches en Eindhoven junto a mi esposa. El último día, antes de emprender la vuelta a La Haya, estuvimos mirando a ver si podíamos visitar alguna otra atracción que tuviera la ciudad.
Lamentablemente no había mucho más para ver. Lo que me llamó la atención es que un poco alejado del centro hay un edificio que tiene forma de plato volador. Se trata de Evoluon, que abrió en 1966 y es un centro de conferencias que alguna vez alojó un museo de ciencia.
Me hubiera gustado ir de noche porque por lo que pude ver, se ilumina con diferentes colores. Quedará para la próxima.
Conclusiones y recomendaciones si vas a Eindhoven
Como te comentaba, Eindhoven no es una ciudad turística. Si estás de viaje por Holanda, te recomiendo primero que vayas a Amsterdam, Rotterdam, La Haya, Delft, Utrecht, Maastricht y quizás recién ahí te pegues una vuelta por Eindhoven.
La última recomendación es que si ya estás allí, tengas en cuenta que lo mejor es cenar alrededor de las 19:00 horas, ya que pasado ese horario, en algunos lugares cierran las cocinas y puede que te quedes sin cenar.