En esta oportunidad me voy a meter con un tema complejo y polémico. Voy a guiarte en cómo elegir un hosting para contratar y así alojar tus proyectos web en internet.
Este artículo te será de utilidad tanto si sos un freelancer que trabaja con proyectos web, como si tenés un negocio y necesitás una página web, o si trabajás en una compañía y te están pidiendo que contrates un hosting o alguna solución en la nube.
Lo primero que quiero aclararte es que las indicaciones y recomendaciones que encontrarás en este artículo parten de mi punto de vista que se basa en la experiencia de años de trabajar con muchos tipos de hostings y servicios en la nube.
Como te comentaré en una sección específica del artículo, es importante leer foros, blogs y todo tipo de referencias antes de decantarse por una empresa de hosting u otra. Así que tomá este artículo como una guía y después investigá por tu cuenta.
Al final del artículo te recomendaré el servicio que yo uso. Es el mejor que encontré luego de años de ir cambiando y sufriendo una mala experiencia tras otra. Nuevamente, te invitaré a que investigues por tu cuenta si a vos también te sirve ese servicio o no.
Este es un artículo largo y lo voy a dividir en distintas partes: primero te contaré sobre mi experiencia con hostings.
Luego iré punto por punto destacando los aspectos que yo considero importantes a la hora de elegir un hosting,
Posteriormente, te indicaré qué fuentes podés consultar para investigar si un hosting es bueno o no.
Finalmente, como te comentaba te recomendaré uno en particular.
No es necesario que leas todas las secciones. Podés ir directamente a la que más te interese.
Contenido
Mi experiencia con los hostings
A lo largo de los años, trabajando para empresas y también de forma independiente, pasé por distintos hostings. Algunos argentinos, otros internacionales. En total, calculo haber utilizado al menos unos 20 distintos. Entre ellos se incluyen las plataformas en la nube más conocidas, los hostings más comunes y un puñado de hostings ignotos.
En general, las experiencias han sido de regulares a espantosas. En gran medida, tener un proyecto alojado en un servidor de una empresa es algo que te puede traer más de un dolor de cabeza. Especialmente si generás dinero con los sitios que tenés alojados, que es lo que ocurre en mi caso.
En resumen, después de pasar por diferentes hostings puedo decir que en general son todos malos pero que hay algunos que se pueden rescatar. Si te interesa identificar cuáles son esos, seguí leyendo el artículo.
Aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir hosting
A continuación voy a enumerar y explicar los aspectos que yo miro a la hora de contratar un hosting. No me voy a detener en métricas ni tampoco voy a diferenciar por planes.
Cada hosting tiene diferentes planes, pero en general hay ciertas líneas de competencia: los hostings compartidos, los VPS y los dedicados. Yo hablaré en este caso en general, sin referirme puntualmente a ningún plan o empresa.
Hay que tener en cuenta que muchos de estos aspectos a priori uno nunca los sabe, así que hay que investigar y tratar de anticiparse. Una vez que se contrató un hosting, estos mismos aspectos pueden servir para saber si la calidad del producto es buena o no.
Uptime
Lo que más me interesa en el mundo acerca de un hosting es su uptime. El uptime es el porcentaje de tiempo que el servidor está disponible en un periodo de tiempo determinado. En otras palabras, es saber si el servidor se cae seguido o no.
Una caída puede ocasionar pérdidas monetarias. Esto te afecta ya sea que tengas alojado un sitio web propio monetizado o que le estés alojando el sitio web o una intranet a un cliente.
Pretender que el servidor no se caiga nunca es mucho pedir. Pero sí se puede buscar un hosting que te garantice que el uptime está arriba del 99%. ¡Y bastante más arriba también! ¿Por qué? Porque el dato con el que los hostings se promocionan se basa en un año entero de tiempo.
Hablando más claro: si el hosting te garantiza un uptime de 99% significa que a lo largo de un año puede estar caído durante casi 3 días. Y eso es inadmisible.
Actualmente uso UptimeRobot, una herramienta gratuita para controlar el uptime del hosting que tengo contratado. Cuando se cae, me llega una notificación por mail y por Telegram.
Limitaciones
Otro aspecto que investigo en detalle antes de contratar un hosting es si tiene algún tipo de limitaciones. Probablemente tenga recursos limitados según el plan. Eso me parece lógico. Lo que trato de descubrir es si no me meten grandes limitaciones o si omiten darme algún recurso.
A las limitaciones que más atención les presto son obviamente a las de ancho de banda, número de conexiones simultáneas, espacio en disco, cantidad de bases de datos, cantidad de cuentas de correo electrónico y cantidad de cuentas FTP.
Lo bueno es que estos ítems generalmente están aclarados en las descripciones de los planes antes de contratarlos. Pero, como siempre, puede aparecer luego alguna sorpresita ingrata.
Panel de administración
Todos los hostings tienen su panel de administración. En mi caso, estoy muy acostumbrado a cPanel y WHM y no me gusta optar por otro tipo de administrador. Tampoco me gusta que me adapten estos populares gestores de servidores web, algo que suelen hacer algunas compañías de hosting.
Al cPanel y el WHM se le suman también las opciones propias del hosting, algunas vinculadas al registro de dominios y otros servicios y herramientas que pueden ofrecer. Mi interés aquí es que tengan una interfaz simple, fácil de usar y que funcione correctamente.
Quizás te parezca algo natural que debería estar por defecto, pero no te imaginás las cosas que he visto.
En resumen, si el hosting viene con cPanel básico, para mí ya suma un punto.
Tecnologías
Cuando me refiero a tecnologías, me refiero a las versiones. Claro que uno va a tener que elegir siempre el hosting que le ofrece un servidor o herramientas puntuales en una tecnología determinada.
El problema es que muchos hostings están super desactualizados. Y esto pasa especialmente con los hostings de PHP, que siguen corriendo versiones ya obsoletas para las cuales ya no se programan actualizaciones de seguridad.
En mi opinión, el factor de tener tecnologías actualizadas es decisivo. Jamás contrataría una empresa de alojamiento web que tenga desactualizadas las versiones del software que corre el servidor.
Acceso remoto
Una herramienta que siempre me interesa tener a mi alcance es la de poder acceder de forma remota al servidor, a través de SSH. Algunos creerán que este es un servicio solo para planes VPS o superiores, pero no. Algunos hostings compartidos también permiten conectarse a distancia por línea de comandos.
¿Por qué necesito acceso remoto? En general, porque considero que es una excelente herramienta para resolver algunos problemas de forma rápida y eficaz, en lugar de tener que usar cPanel o algún otro tipo de herramienta visual.
Por otro lado, porque suelo utilizar herramientas de integración continua, que a su vez utilizan rsync o programas similares para copiar archivos o hacer distintos tipos de operaciones.
Si un hosting no me permite conectarme por SSH de forma remota en algún punto siento que no me están dando todas las opciones posibles.
Certificados SSL gratuitos
A esta altura, que un hosting insista en venderte certificados SSL sin darte la posibilidad de instalarte uno gratuito, me parece una estafa.
Si el hosting te da acceso a cPanel y WHM es posible instalar un certificado como los de Zero SSL. No hay que configurar nada adicional y el hosting no tiene por qué cobrarte nada extra.
Sin embargo, si bien estos certificados digitales son gratuitos, instalar uno puede ser confuso para el que no entiende demasiado de sistemas. Y para el que entiende de sistemas es engorroso, repetitivo y aburrido. Sin considerar que hay que repetir el proceso cada 3 meses ya que los certificados expiran en ese periodo de tiempo.
Por todo este motivo, considero que un hosting hoy en día debería ofrecer certificados SSL gratuitos que se instalen con un solo clic. De no contar con esta opción, lo descartaría.
Cantidad de opciones y personalización
Hay un ítem que me parece que tiene su peso y es la cantidad de opciones que ofrece el hosting. En general, si viene con cPanel y WHM sé que hay un conjunto de funciones que estarán incluidas.
Sin embargo, a veces el hosting quita opciones, haciendo que administrarlo sea mucho más díficil o que lleve más tiempo. Aclaro, que no estoy hablando de limitaciones como explicaba antes, sino en cantidad de recursos. Aquí me refiero a opciones que simplemente no están.
En este aparatado no quiero hacer mención a una opción en concreto como lo hice con acceso remoto. Aquí me refiero a conjuntos de opciones en general.
Uno se da cuenta cuándo un hosting le deja personalizar más o menos. Particularmente, me ocurre que si no puedo configurar algunos aspectos del servidor o del hosting en general, me siento demasiado contenido.
En esos casos, prefiero un poco más de libertad. Por supuesto, la busco en otro hosting.
Ubicación
Cuando hablo de ubicación no me refiero a los servidores porque no es algo que realmente me importe, en tanto y en cuanto el servicio sera bueno en términos de uptime y velocidad.
En realidad agrego este ítem porque según el tipo de proyecto que tenga, o el tipo de cliente, me parece mejor contratar un hosting local. Lo que yo veo es que si el cliente requiere muchos servicios de alojamiento web, prefiero contratarle un hosting local y que tenga una persona de contacto para consultarle.
A veces, también hay que tener en cuenta que determinados proyectos requieren un hosting local, al menos en Argentina. Me pasó algo por el estilo cuando trabajaba en una compañía que tenía como cliente a una organización pública.
Precio
Por supuesto que el precio es un factor determinante. Si es demasiado caro y está fuera de mis posibilidades, por más que tenga todas las opciones que necesito, no lo voy a poder contratar.
Como ocurre con cualquier servicio, lo que hay que hacer es revisar una por una las opciones que ofrece un hosting y compararlo con otros. A la fórmula hay que agregarle las opiniones, reviews y críticas que puedas encontrar en la web.
A la hora de definir lo fundamental es que el precio no esté demasiado arriba como para no poder pagarlo, ni tampoco demasiado abajo como para levantar sospechas.
No hay que perder de vista que cada compañía de hosting tiene sus planes. Por eso es necesario comparar plan contra plan. Está claro no vamos a encontrar planes exactamente iguales. Pero, en general, la industria mantiene precios similares para planes de la misma línea.
Soporte
Lo dejé para el final porque quiero que te quede más fresco cuando termines de leer el artículo.
El soporte es un aspecto crucial a la hora de elegir un hosting. ¿Por qué? Porque siempre vas a tener que resolver algún tipo de problema con tu hosting y es necesario que tengas un buen soporte.
Personalmente, le escapo a los soportes telefónicos. Al llamar te puede tocar un técnico que entienda o te puede tocar uno que no tenga idea de nada. Todo lo que te diga serán palabras que se llevará el viento (¡qué poético me puse!). Por eso prefiero el contacto a soporte técnico vía mail o chat.
Con el soporte vía mail queda todo un hilo con la conversación, el número de incidente que se genera a partir del reclamo y no hay ambigüedades.
El chat tiene las mismas particularidades con la ventaja de que es en tiempo real. Algunos hostings, como el que te voy a recomendar al final, tienen este tipo de soporte y al finalizar el chat con el técnico, podés enviarte por mail toda la conversación con datos relacionados a tu consulta como la fecha, el motivo y quién te atendió.
Por supuesto que en ambos casos hay que considerar el tiempo de espera. Si enviás un mail hoy y te responden en una semana, no sirve. Si te conectás para chatear y tenés que esperar dos horas, tampoco.
Si usás el hosting para trabajar de forma profesional, ya sea para alojar páginas de tus clientes, o propias, el aspecto del soporte no puede ser considerado a la ligera.
¿Y la velocidad?
Tengo en la mente la pregunta que alguno me hizo alguna vez: «¿Conocés un hosting rápido?».
Lo cierto es que la velocidad de respuesta del hosting depende de tantos factores que es difícil de meter en la ecuación junto con los otros parámetros.
La velocidad de respuesta del hosting depende del peso del recurso y de lo optimizado que esté. Si se utilizan CDNs o no. O si se integra con algún servicio como CloudFlare. Pero por sobre todos estos factores está nuevamente el plan de hosting que elijas. En mi experiencia, cualquier plan VPS alcanza para tener una velocidad aceptable de carga para una web promedio que no sea de alta demanda.
Qué referencias tener en cuenta
Hay muchos hostings y muchas opiniones cruzadas sobre cuál es mejor. Si buscás solo críticas, vas a encontrar de todos y no vas a querer quedarte con ninguno.
A continuación, enumero las fuentes de referencias donde podés buscar y encontrar opiniones sobre hostings.
- Blogs: cualquier blog, tal como el que estás leyendo actualmente. Podrás leer la experiencia personal de alguien con un hosting en particular.
- Foros: en los foros encontrarás algunos consejos puntuales y opiniones enfrentadas sobre empresas de alojamiento web.
- Reseñas y calificaciones: podrás encontrar algunos sitios especializados que se dedican a comparar los distintos servicios de hosting. Si te interesa la parte técnica a fondo, es recomendable que los busques.
- Recomendaciones de conocidos: por supuesto que si tenés un conocido que te recomienda un hosting en particular, tenelo en cuenta.
¿Qué hosting uso yo?
Después de usar Bluehost durante muchos años, decidí pasarme a Digital Ocean. ¿Por qué? El precio de Bluehost se había hecho exorbitante y no me permitían hacer downgrade de los recursos para pagar menos.
Digital Ocean es mucho más que un hosting. Es una solución en la nube, con diferentes servicios y opciones. Si tu idea es montar el clásico servidor web con Linux y Apache, te aclaro que se requiere un mayor conocimiento técnico ya que no hay administradores visuales como cPanel o WHM para manejar cada aspecto de tu alojamiento web.
Sin embargo, Digital Ocean maneja el concepto de Droplet, máquinas virtuales a las que se les puede instalar lo que uno quiera, similares a los clásicos VPS.
En mi opinión, lo mejor de Digital Ocean es la gran documentación que tiene. Seguramente, si trabajás en sistemas, habrás llegado alguna vez a algún tutorial o guía de Digital Ocean, independientemente que tengas cuenta o no allí.
Digital Ocean también tiene la opción de crear contenedores especiales para apps. Esto es una gran ventaja si te dedicás a la programación y querés pensar solamente en programar y nada más.
Si te interesa, te dejo un enlace a Digital Ocean con el que obtendrás 200 dólares de crédito para consumir en 60 días.
Resumiendo
En este artículo te conté cuáles son los aspectos que yo tengo en cuenta a la hora de elegir un hosting. Si te gustan las métricas de velocidad, ancho de banda y otros parámetros, te recomiendo que explores en otros sitios.
También está bueno que vayas armando tu experiencia y que puedas hacer tu propia lista de aspectos que te interesan. Podrán ser como una lista de control en el futuro, cuando tengas que contratar un nuevo hosting.
Eso es todo hasta aquí. Gracias por leerme. ¡Hasta la próxima!
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