En este artículo te voy a dar mi opinión sobre el panorama en el mundo de la creación de contenido de Argentina. Cuáles son los problemas que percibo, qué se podría hacer (que de todos modos no se va a hacer) y cuál creo que es la inevitable consecuencia de ello.
Aquí también haré una férrea defensa de bloggers y de youtubers. Especialmente de youtubers, que están siendo bastante despreciados por la comunidad. Esto me molesta porque la mayoría son chicos y chicas con talento, buenas intenciones, y capacidad para crear buen contenido.
Contenido
- 1 El disparador: AdSense y Western Union
- 2 Los comentarios de desprecio
- 3 Creadores de contenido
- 4 El desprecio a los youtubers exportadores de servicios
- 5 ¿Cómo se podría fomentar la industria de los creadores de contenido?
- 6 ¿El éxodo de los creadores de contenido?
- 7 Más contenido sobre blogging y modo de vida freelancer en Crónicas Freelancer
El disparador: AdSense y Western Union
Lo que me lleva a escribir este artículo son algunos comentarios que leí respecto del famoso anuncio de Google anticipando que ya no se podrá usar Western Union como método de pago para AdSense.
Si sos ajeno al mundo de la monetización de sitios webs, te lo puedo resumir de la siguiente manera. AdSense es el programa de publicidad de Google, que usamos bloggers y youtubers. Nos permite poner publicidad en nuestro contenido, ya sea un sitio web como este que estás leyendo, o un video de YouTube.
Las diferentes restricciones cambiaras que se fueron implementando en Argentina desde 2019, hicieron que cada vez fuera más difícil cobrar esos ingresos que vienen del exterior (aunque esto también ocurría antes de 2015).
Hasta el momento de escribir este artículo, AdSense ofrece en Argentina dos métodos de pago: transferencia bancaria y Western Union. Con el primero, se pierde el 50% de los ingresos, ya que el dinero que ingresa se pesifica forzosamente a dólar ofiical y encima el banco cobra su comisión. Con el segundo, se pierde un 20% más o menos.
El tema es que con la retirada de Western Union como medio de pago, la única alternativa es perder el 50% a través de una transferencia bancaria.
Ni hablar que los costos de los creadores de contenido están atados a dólar: hostings, suscripciones a servicios, temas y plugins, licencias de software y herramientas, equipo de video, micrófonos y todo tipo de hardware.
La situación es obviamente insostenible y muchos creadores de contenido se están preguntando qué hacer.
Si te interesa saber más sobre esto, te recomiendo el artículo: Cobrar AdSense en Argentina: el desfavorable panorama actual. En esa entrada, hago algunas cuentas para explicar cómo es que se pierde tanto dinero al cobrar.
Los comentarios de desprecio
Ante esta situación, encontré más de un comentario en foros y blogs donde se desprecia esta actividad y hasta se festejan estas restricciones estúpidas.
Se da en mayor medida con los youtubers. Quizás porque a los bloggers nos asocian con algún tipo de lírica por nuestra capacidad para escribir.
Se ve que en el imaginario popular un youtuber es un idiota que prende la cámara dice «Hola, amigos de YouTube», le agrega algunas boludeces y por pura casualidad levanta un séquito de un millón de personas.
Bueno, no, no es así.
Como sé que esta concepción parte de la ignorancia más profunda. En los próximos párrafos voy a intentar echar un poco de luz a este trabajo al que podemos llamar creación de contenido. Me detendré tanto en el mundo del blogging como en el de YouTube, aunque no estoy tan metido a fondo con este último.
Creadores de contenido
¿Qué hacen los creadores de contenidos?
Lo podría resumir de la siguiente manera: los creadores de contenidos generan artículos y videos de calidad en internet.
Un creador de contenidos escribe las entradas de blog que lees cuando buscás tips para afeitarte parejo o señales de que te equivocaste de carrera. Es también el que te muestra cómo es ese celular que te querés comprar. O el que te cuenta un chiste que te hace reír y te hace olvidar de un problema. También son esos que mirás a ver cómo reaccionan a cosas que vos ya viste y te gustaron.
Los creadores de contenido te informan y te dan su opinión. Otros hacen memes boludos que le mandás a tus amigos y otros, en cambio, te educan. Sí, incluso mejor que en la escuela.
Entonces, un creador de contenido es todo aquel que carga su contenido en internet. Los mejores tendrán mayor repercusión y los peores no los mirará nadie y recibirán muchos dislikes.
En este artículo cuando me refiero a creadores de contenido, me centro exclusivamente en aquellos que monetizan su contenido. Es decir, que ganan dinero a través de lo que hacen. Lo cual nos lleva al siguiente punto.
¿Cómo gana dinero un creador de contenido en internet?
Hay diferentes métodos a través de los cuales se puede monetizar un blog o un canal de YouTube. A continuación resumiré brevemente algunos, sin entrar en mucho detalle.
- AdSense: es el canal de publicidad de Google. Es el más extendido, más fácil de usar y el nativo de los videos de YouTube. Son los anuncios que aparecen en los sitios webs y también en los videos.
- Otras redes publicitarias: esto es solo para bloggers y webmasters. Son alternativas a AdSense.
- Afiliación: consiste en recomendar artículos y enviar tráfico a sitios de venta de productos y servicios a través de enlaces. Cuando un usuario compra en ese otro sitio, el afiliado que lo llevó allí se lleva una comisión.
- Publicidad tradicional: me refiero a pactar algún tipo de publicidad con una marca, una empresa o un emprendedor por nombrar o mostrar productos.
- Canje: similar al anterior pero en vez de percibir dinero, se obtiene algún producto o servicio a cambio de la publicidad.
De todos estos, AdSense representa el más importante de todos. Esto se debe a lo fácil que es implementarlo, especialmente para el caso de los YouTubers.
¿Qué habilidades debe tener un creador de contenidos?
Para poder crear contenido de calidad se necesitan algunas capacidades.
Capacidades comunes
En este primer lote voy a incluir algunas capacidades básicas que pueden ser comunes a las distintas áreas. Aquí entra el manejo del idioma español, o el manejo de otros idiomas (ya sea para hablar o para investigar).
También es incluyen habilidades de programación, aunque sean básicas. Yo soy programador web y no es lo mismo los conocimientos que aplico para mis proyectos de desarrollo que los que uso para mis sitios webs monetizables. Pero siempre en algún momento algo de código puede que tengas que tocar, aunque sea el más básico HTML.
Otro campo en el que hay que meterse es el del marketing digital. Para ver las ganancias obtenidas, para promocionar el trabajo realizado, es necesario dominar algunos conceptos clave.
El diseño gráfico es otra área indispensable. Ya sea para hacer un pequeño banner o para definir el estilo de un canal o un blog.
Además de estas áreas está también la cultura general, la capacidad de investigar y de seleccionar información.
Bloggers
En el caso de los bloggers, me puedo poner como ejemplo. En primer lugar, hay que saber escribir. Si bien no es necesario ser escritor, cuanto mejores textos se produzcan, mejor.
Los textos de blog tienen algunas características determinadas y hay que aprender a generarlas.
En cuanto a las ventas, tener conocimientos de copywriting puede ser una ventaja decisiva.
YouTubers
Los youtubers tienen que saber comunicarse de forma oral. Deben escribir guiones, repetir tomas y editar.
La edición de video no es algo trivial. Hay que entender del tema, dominar el software de edición y luego dedicar horas y horas de edición hasta que el resultado sea el deseado.
En cuanto a la comunicación oral, la dicción es fundamental. Nadie va a seguir a alguien a quien no se le entiende cuando habla.
Equipos multidisciplinarios
Como ves, hay una gran variedad de áreas que es necesario dominar. A veces una sola persona no puede hacerlo todo y por eso aparecen los equipos. Se juntan freelancers o se forman pequeñas empresas para producir sitios webs completos de contenido o incluso canales de YouTube.
Quizás de esta forma se pierda la frescura y la originalidad del referente aquel a quien el público quiere seguir, pero estos emprendimientos son igualmente válidos y productivos que los individuales.
Talento
Hay una cualidad que la quiero poner aparte porque es fundamental. Nadie levanta y mantiene 500.000 seguidores o recibe 200.000 visitas mensuales de culo (quizás sí algún famoso).
Para poder tener éxito como creador de contenido se necesita talento. Y esto es algo que a mucha gente le duele reconocer.
Sí, estos pibes que prenden la cámara y dicen «Hola, amigos de YouTube» algo de talento tienen.
¿Te jode? Bueno, bienvenido al siglo XXI.
El negocio de la creación de contenidos en el que todos ganan
La publicidad online y la creación de contenidos es un negocio en el que todos pueden ganar.
Las agencias, empresas y personas que venden productos pueden encontrar nichos específicos para promocionar lo que producen. Antiguamente hacer una campaña de publicidad era un gran desperdicio de dinero y era difícil de medir si se llegaba al público deseado. Hoy en día, se puede saber adónde fue cada centavo. Esto se traduce en más llegada a un público bien definido y menos gasto.
Los creadores de contenido ganan dinero por promocionar los productos y servicios de las empresas. Y no hay límite respecto a cuánto ganar. Cuanto más puedan hacer vender, más dinero ganarán. Para hacerlo más interesante, AdSense y otros canales de monetización pagan en moneda extranjera, dejando márgenes más que atractivos para los creadores de contenido.
Por si fuera poco, el Estado también gana ya que mantiene una industria exportadora en crecimiento y además cobra impuestos a los creadores de contenido.
El caso de Argentina
El caso de Argentina es especial, ya que el Estado gana en primer lugar porque grava con el IVA la publicidad que compran las empresas. Esto hace que sea más difícil que empresas y emprendedores apuesten a la publicidad.
También cobra monotributo o autónomos a los creadores de contenido y se queda con sus dólares, mientras que les entrega menos del 50% de lo que ganaron… y en pesos.
Obviamente esto hace que cada vez haya menos gente que se dedique a la creación de contenidos y muchas personas que actualmente lo hacen, están pensando en abandonar la actividad.
En vez de apuntar a generar una pequeña industria exportadora, el país decide pegarse un tiro en el pie y aniquilar un sector que a futuro podría dar mucho rédito.
Esto mismo se puede extrapolar a muchas otras industrias y sectores exportadores.
El desprecio a los youtubers exportadores de servicios
Nada más estúpido, entonces, que despreciar y denigrar a los bloggers y youtubers. Nada más imbécil que festejar que no puedan ganar lo que les corresponde.
Estos chicos y chicas, ya que en su mayoría son sub-25, son exportadores de servicios que traen dólares al país.
Lo mejor que podría hacer el país es alentarlos para que si hoy tenemos 100, mañana tengamos 1.000 y pasado mañana, 100.000. De esta forma, una pequeña industria exportadora estaría haciendo su parte.
¿Cómo se podría fomentar la industria de los creadores de contenido?
Para que este sector aporte económicamente y crezca, se requiere, primero que nada, reconocerlo y valorarlo.
Lo siguiente que hay que hacer es capacitarlo en materia impositiva y aquí sí tengo que hacerles una crítica a muchos de los creadores de contenido: es imperioso que facturen y paguen impuestos.
Se los digo yo, que hay días que me levanto anarcocapitalista.
Muchos de estos chicos no facturan en primer lugar porque no tienen idea de nada. Hace un año estaban en la secundaria y ahora, de golpe, tienen miles de seguidores y les llega una transferencia de 3 mil dólares mensuales.
Esto no los excusa de sus responsabilidades. Pero en vez de denigrarlos, hay que informarlos y capacitarlos para que cumplan con sus deberes.
Por eso mismo me parece que habría que guiarlos. No, no hace falta registrarlos ni nada por el estilo. Basta con que tengan un portal o un lugar virtual donde puedan ver qué pasos seguir para dedicarse a lo que hacen sin estar en la clandestinidad.
Por otro lado, no puede ser que pierdan el 50% de lo que ganan. Es inaudito.
Insisto, no hay que darles ningún beneficio. Simplemente permitirles cobrar lo que generan.
¿El éxodo de los creadores de contenido?
Habrás notado que en una parte del artículo escribí en tercera persona. Hablé de ellos y no de nosotros.
Yo soy blogger pero también programador. No vivo del blogging y además yo ya emigré. Si bien fue por varios motivos ajenos a todo esto, no sé qué otra opción me hubiera quedado.
Hay mucha gente que crea contenido que vive en Argenitna y en este momento se está preguntando qué hacer.
Algunos se van a ir del país. Los que ganen mucho no van a tener que dudarlo demasiado.
Otros van a desistir. Abandonarán sus canales y sus sitios webs. Cada tanto agregarán algo de contenido pero porque les gusta hacerlo. Porque es su pasión. Pero olvídense de actualizaciones diarias o incluso semanales.
Unos pocos seguirán como siempre y lo harán por hobbie o por fama.
Seguramente aparezca alguna alternativa para cobrar lo que corresponde. Ojalá así sea, pero eso no va a tapar que el panorama a futuro es cada vez más oscuro.
Más allá de las alternativas e incluso habiendo posibilidad de cobrar los ingresos, lo que está claro es que de continuar la tendencia, los creadores de contenido se irán desprofesionalizando, la calidad del contenido bajará y lo que podría ser una industria rentable desaparecerá.
Más contenido sobre blogging y modo de vida freelancer en Crónicas Freelancer
Espero que este artículo haya sido de tu interés.
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Eso es todo. Muchas gracias por tomarte el tiempo de leerme.
Hasta la próxima.
Fuente foto
Y ahora con el nuevo impuesto del 35% y el cupo a las tarjetas se va todo más al demonio. Los que pagamos servidores para hostear nuestros contenidos no vamos a tener otra opción que irnos de este horrendo país.
Alejandro, te fuiste a Uruguay al final? Te lo pregunta un uruguayo en Argentina, que carajo hago aca? jeje.
Hola, Daniel.
Sí, me fui a Uruguay finalmente, aunque por motivos personales ajenos a lo que cuento en el artículo. No sé qué otra alternativa hubiera tenido de todos modos. Quizás hubiera agarrado algún trabajo de programación en Europa o en algún lugar exótico. En fin, imposible saber la historia de lo que pudo haber sido.
Saludos